Con algunas buenas prácticas simples, los comerciantes pueden reducir el riesgo de ser víctimas de estafas digitales
La digitalización de pagos puso en el centro el desafío de garantizar la seguridad en las transacciones, no solo para los usuarios sino también para los comerciantes. Las estafas y fraudes son una amenaza constante, pero con las medidas preventivas adecuadas, es posible minimizar los riesgos.
En las ventas presenciales, es recomendable usar terminales de pago con chip, tecnología contactless (sin contacto) o códigos QR, que son más seguras y rápidas.
Según Diego Demarco, Manager de Operaciones de Getnet, “es clave identificar las terminales POS con alguna marca o calco distintivo, no perderlas de vista y evitar que terceros las manipulen. También es fundamental verificar que el nombre del comercio aparezca correctamente en la pantalla de la terminal al momento de realizar la transacción. Esto genera transparencia y ayuda a prevenir confusiones que puedan derivar en contracargos injustificados”.
En cuanto a las transacciones en línea, donde no hay interacción física con el cliente, el experto remarcó la necesidad de implementar procesos para validar la identidad del comprador.
“Evitar estafas no solo depende de la implementación de herramientas tecnológicas, sino también de la adopción de buenas prácticas en cada etapa del proceso de venta”, señaló.
Garantizar la seguridad en los pagos y la información de los clientes es fundamental para cuidar el negocio. Como afirmó Demarco, “tanto en comercios físicos como en plataformas digitales, la clave está en priorizar la seguridad, la transparencia y la validación de datos. Los comerciantes deben proteger a los clientes y, por supuesto, al negocio. Después de todo, un comercio seguro es un negocio sostenible”.
Dejanos tu comentario
Su comentario estará disponible a la brevedad.